Los médicos son más propensos que hace ocho años atrás a utilizar anestesia en las circuncisiones que realizan a los recién nacidos, informó un grupo de investigadores.
En tanto, un segundo estudio reveló que permitir a las madres que lactaran a sus bebés mientras se les realizan otros procedimientos dolorosos podría ayudar a aliviar su malestar.
En algún momento, los médicos creyeron que los niños eran demasiado jóvenes como para experimentar el dolor de la circuncisión o que no lo recordaban, pero investigaciones médicas más recientes demostraron que los bebés no se diferencian de los adultos en ese aspecto, dijo el doctor Daniel Yawman, autor principal del estudio sobre la anestesia.
Un sondeo sobre los programas de residencia médica de Estados Unidos descubrió que el 97% de los directores de Práctica Familiar, Pediatría, Obstetricia y Ginecología enseñaban el uso de anestesia local o tópica en el 2003.
Además, el 84% de estos programas usaban anestesia en los pacientes siempre, o al menos generalmente, informaron investigadores del Centro Médico de la Universidad de Rochester en Ambulatory Pediatrics.
“Esto muestra que el dolor es en realidad un tema mucho más importante de lo que solía ser en el mundo médicoâ€, dijo Yawman, quien agregó que en 1998 sólo el 71% de los programas de residencia enseñaba el uso de anestesia.
A cerca de un millón de recién nacidos se les realiza circuncisión en hospitales estadounidenses cada año, lo que convierte al procedimiento en la operación más común.
La evidencia demuestra que los hombres que tienen hecha la circuncisión son menos propensos a contraer el virus del sida e infecciones del tracto urinario.
La circuncisión, en la cual un médico o un funcionario religioso remueve el prepucio del pene, es también una costumbre muy antigua con un importante significado para judíos y musulmanes.
Desde 1999, las principales organizaciones profesionales recomiendan el uso de anestesia en la circuncisión.
Un segundo estudio publicado esta semana halló que lactar a los bebés mientras son sometidos a un procedimiento doloroso puede tranquilizarlos.
“Estamos buscando un modo natural, sin costos, y fácilmente disponible para reducir el dolorâ€, dijo Prakeshkumar Shah, neonatólogo del Hospital Mount Sinai en Toronto.
Shah y sus colaboradores recopilaron los datos de 11 estudios sobre más de 1 000 recién nacidos.
Fuente: Reuters
