Tu Corazón

Un corazón fuera de control

Si sientes que tu corazón palpita más rápido que de costumbre, y no te estás enamorando de nuevo, más vale que acudas de inmediato con un cardiólogo para que te realice un electrocardiograma, examen que puede descartar o confirmar si sufre fibrilación auricular, padecimiento que provoca latidos anormales, rápidos e irregulares.

Esta arritmia afecta principalmente a los adultos mayores y, según Alejandro Cordero, cardiólogo del IMSS, también causa falta de aire, fatiga, sudoración, náuseas, mareos, opresión del pecho y pérdida del conocimiento.

De acuerdo con Cordero, hasta 25 por ciento de la población mayor de 75 años en México puede llegar a padecer al menos un episodio de fibrilación auricular.

John A. Camm, profesor de cardiología clínica de la Universidad de Londres, asegura que una de cada cuatro personas tienen riesgo de padecer esta alteración y en el 50 por ciento de los casos la hipertensión es la responsable de esta enfermedad.

Datos de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, revelan que otras causas son la insuficiencia cardiaca, la enfermedad de las arterias coronarias, la diabetes, una glándula tiroides más activa de lo normal y la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica.

Camm afirma que el alcohol, el café y el estrés son algunos de los factores desencadenantes.

“Un paciente con fibrilación auricular acude en promedio al hospital entre cuatro y seis veces por año.

“Es frecuente que tenga que ser hospitalizado debido a complicaciones como insuficiencia cardiaca, dolor precordial e infarto cerebral”, alerta Camm.

El especialista señala que la embolia cerebral es la principal y más grave complicación causada por esta arritmia, pues puede de-sencadenar un infarto cerebral.

“Las personas con fibrilación auricular tienen cinco veces más el riesgo de desarrollar una embolia cerebral que quienes no padecen el mal”, señala.

Susano Lara Vaca, presidente de la Sociedad Mexicana de Electrofisiología y Estimulación Cardiaca, explica que la fibrilación auricular provoca que la sangre deje de circular de forma normal y se estanque en el corazón, lo que llega a formar coágulos, los cuales pueden desprenderse y viajar por el torrente sanguíneo hasta el cerebro, donde bloquean el flujo de la sangre y provocan así un infarto.

Cordero precisa que en el grupo de adultos mayores se calcula que más de una tercera parte de las embolias se deben a la fibrilación auricular, lo cual es una causa prevenible si se detectara a tiempo la arritmia.

Fuente: Alejandro Cordero, John A. Camm y Susano Lara Vaca

Shares:

Related Posts

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *