La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió posponer nuevamente la fecha para destruir las que se creen son las últimas reservas de viruela del mundo, un virus mortal cuya expansión fue detenida hace treinta años.
No existe tratamiento para la enfermedad, la cual mató a millones de personas durante la década de 1960 y dejó a muchas otras ciegas o con secuelas. La viruela fue erradicada oficialmente en 1979, después de que se realizara una campaña de vacunación mundial. Estados Unidos y Rusia, que desde entonces tienen en laboratorios de máxima seguridad las muestras sobrantes del virus, se rehusaron en varias oportunidades a destruirlas, ante la posibilidad de que se descubriera que aún hay viruela en algún lugar.
Otros estados, por su parte, temen que los cultivos vivos puedan generar una epidemia si se liberan, y por eso han estado buscando modos de controlar su utilización.
Durante la asamblea anual de la OMS que finalizó el sábado 27, los países se quedaron estancados en el texto de una resolución que apunta a fijar una fecha para destruir las reservas existentes de viruela y limitar las pruebas que se hacen sobre el virus. “Trabajamos en muchos encuentros; dentro y fuera de la sala de reunión, frente al ascensor e incluso en los bañosâ€, dijo Suwit Wibulpolprasert de Tailandia, quien presidió el grupo de trabajo sobre la viruela, durante la cumbre de la OMS en Ginebra. El funcionario tailandés no dio detalles sobre los puntos en los que el debate se estancó durante las reuniones del grupo, que se realizaron a puertas cerradas.
La OMS revisará la resolución en una reunión del consejo ejecutivo en enero. Anteriormente, la organización pospuso un plazo para destruir en el 2002 las muestras de viruela, hasta tanto se hallaran nuevos tratamientos o vacunas para la enfermedad, después de que Estados Unidos señalara que mantendría las reservas a mano para combatir cualquier rebrote de la dolencia.
El secretario de Salud y Servicios Humanos estadounidense, Mike Leavitt, dijo a periodistas la semana pasada en Ginebra que los científicos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades en Atlanta estaban analizando el virus de la viruela para encontrar mejores formas de responder a cualquier brote.
Fuente: Reuters