¿Qué prefiere usar: lentes de contacto o anteojos? Tanto unos como otros tienen la misma función: corregir defectos visuales y mejorar la visión, y ambos tienen ventajas y desventajas.
Los defectos visuales que corrigen son tres: el astigmatismo, la hipermetropía y la miopía.
A diferencia de los anteojos, los lentes de contacto están, como su nombre lo dice, en contacto con el ojo, así que la corrección del astigmatismo, por ejemplo, es mejor, asegura Jorge Rafael Peniche, cirujano oftalmólogo del Hospital Ángeles Metropolitano, en la Ciudad de México.
Otra ventaja de usarlos es que no provocan mareos o distorsiones de las imágenes, como pueden causarlas los anteojos, indica.
“En conclusión, con un lente de contacto se ve mejor. En casos de astigmatismo, hipermetropía y miopía severas son mejor opción, pues los anteojos pueden ser pesados por el grosor del lente”, explica el oftalmólogo.
Desventajas
El problema de los lentes de contacto es que al generar sensación de cuerpo extraño y lagrimeo las personas dejan de usarlos.
“También puede causar alergia, lo que provoca ojo rojo, comezón y ardor”, advierte.
Otra desventaja, menciona Peniche Camacho, es que pueden causar infecciones; por ello recomienda acudir con el oftalmólogo para que el paciente sepa qué le conviene más, según su estado, si los anteojos, los lentes de contacto o incluso una cirugía.
Además, indica que cuando una persona va a usar por primera vez lentes no es aconsejable acudir a una óptica.
“Sucede como en las farmacias, las personas creen que quienes atienden son farmacéuticos, pero no lo son, y les piden consejos sobre medicamentos. En las ópticas hacen lo mismo y muchas veces éstas no cuentan ni con optometristas”, alerta.
Duros y blandos
De acuerdo con Peniche Camacho, los lentes de contacto que surgieron primero fueron los rígidos. Los blandos tienen alrededor de dos décadas en el mercado.
“Al principio estos no corregían el astigmatismo, sólo la hipermetropía y la miopía, pero han evolucionado y en la actualidad sí lo corrigen”, comenta el especialista.
La ventaja es que son más cómodos que los duros, la desventaja es que causan alergias con mayor facilidad.
Son para verte mejor
Los anteojos, también llamados gafas o lentes, son la forma más común de accesorios para los ojos, usada para corregir o mejorar muchos tipos de problemas para la visión. Tienen un marco que sostiene dos piezas de vidrio o de plástico, las cuales han sido encajadas en forma de lentes para corregir los errores de refracción.
Se consideran errores de refracción afecciones como la miopía (la dificultad de ver de lejos), la hipermetropía (la dificultad de ver de cerca) y el astigmatismo (la visión borrosa debido a una irregularidad en la forma de la córnea). Los anteojos realizan su función por medio del aumento o la disminución del poder que tienen la córnea y el lente del ojo para enfocarse.
Los lentes de contacto se usan directamente en la córnea del ojo. Al igual que los anteojos, ayudan a corregir los errores de refracción y realizan su función por medio del aumento o la disminución del poder que tiene la córnea y los lentes del ojo para enfocarse.
Opciones para diversas necesidades
Los tipos de lentes usados en los anteojos dependen del problema de la visión, y pueden incluir los siguientes:
· Cóncavos. Son más delgados en el centro.
· Convexos. Son más gruesos en el centro, como en una lupa. Se usan para corregir hipermetropía.
· Cilíndricos. Tienen una curva más grande en una dirección que en la otra y se usan con frecuencia para corregir el astigmatismo.
Diferencias
La diferencia entre un oftalmólogo y un optometrista es:
· Oftalmólogo: médico cirujano que se especializa en las enfermedades de los ojos.
· Optometrista: no es médico. Se prepara en la creación y graduación del lente.
Fuente: Jorge Rafael Peniche
