A pesar de que la soledad permite a las personas estar en contacto consigo mismas e identificar sus sentimientos y opiniones, para la mayoría es una experiencia indeseada que puede provocar depresión y ansiedad, indica la psicóloga clínica Alma Isabel Pérez Salcedo.
“Escuchamos tanto a los demás que dejamos de escucharnos a nosotros mismos. Esto sucede porque nos educan para comportarnos con base en la opinión de los otros“, asegura Pérez Salcedo, especialista en Gestalt.
La experta comenta que en lugar de que las personas sean incapaces de escucharse a sí mismas, por sólo estar atentas a lo que dicen los demás, deberían poner atención a su voz interna que se manifiesta en la soledad y que sabe perfectamente qué es lo que necesitan.
“Es muy importante estar en contacto con uno mismo y no depender de los demás para tener satisfacción personal. Es necesario ‘hablar’ con nuestros miedos, preocupaciones y sueños, podemos ignorarlos pero esto equivale a quedarnos bloqueados”.
Pérez Salcedo asegura que en la mayoría de los casos los individuos no están solos por elección propia sino por las circunstancias, cuando la soledad debería ser una opción voluntaria en algún momento de la vida.
Aclara que los humanos son seres sociales por naturaleza y necesitan de los demás para sobrevivir, así que estar solo no significa cancelar las redes sociales, sino procurarse momentos de soledad. La idea, precisa la especialista, es conseguir un equilibrio.
“Debe existir un tiempo para comunicarnos con los demás y otro para establecer contacto con lo más profundo de nuestro ser”, puntualiza.
La soledad, señala, constituye una experiencia subjetiva, pues hay quienes pueden sentirse solos aún cuando tienen compañía, y hay quienes aun estando solos no sienten la soledad.
Se le ha satanizado
Explica que esta condición se vive de manera negativa porque normalmente se identifica en momentos de crisis cuando sucede, por ejemplo, la pérdida de un ser querido.
Por eso, lo ideal, asegura, es que las personas aprendan a estar solas aun cuando tienen compañía y para ello es importante que se creen un espacio al día o a la semana para tener un encuentro consigo mismas.
“La idea es saber disfrutar de la soledad, de tener un espacio propio, el cual con el tiempo las hará sentirse muy plenas”, asegura.
Además, de acuerdo con la psicóloga, la soledad también sirve para descubrir habilidades que no conocían.
Tipos de soledad
La psicóloga distingue dos tipos de soledad:
Emocional. Que es cuando se da la ausencia de una relación intensa con otra persona que produzca satisfacción.
Social. Que sucede cuando hay falta de pertenencia a un grupo en el que el individuo comparte intereses y preocupaciones.
Fuente: Alma Isabel Pérez Salcedo