Aprovechemos este dia para aproximarnos un poco más a la experiencia del amor. En el día del amor y la amistad, qué agradable resultaría reflexionar sobre el amor, en su manifestación más profunda y de cómo engloba nuestra vida, abarcando nuestra existencia.
Para ello quiero poner a consideración de ustedes y como una opción muy interesante el libro de Erich Fromm titulado “El Arte de Amar”.
Erich Fromm, es un psicoanalista que creó toda una escuela dentro del psicoanálisis y que lleva su nombre, y replanteó algunos conceptos de Sigmund Freud, el creador del psicoanálisis.
Como un dato interesante, Fromm se doctoró a los 26 años de edad; escribió varios libros, entre ellos “El Arte de Amar” que hoy nos disponemos a comentar. En este texto, el autor enfoca sus ideas entorno al tema del amor y nos habla de él, nos dice cómo ha sido usado en la actualidad, cómo lo hemos confundido y sus motivos; nos habla también de nuestra capacidad de amar.
El libro está divido en cuatro capítulos, cuyos títulos son: I. ¿El amor es un arte? II. La teoría del amor. III. El amor y su desintegración en la sociedad occidental contemporánea. IV. La práctica del amor.
En primer término, Fromm, en este texto, retoma la idea del amor como arte, que como tal hay que aprender la teoría y sobre todo practicar, y mucho.
Hace la analogía de que “si quiero aprender de la medicina, primero debo conocer los hechos relativos al cuerpo humano y a las diversas enfermedades. Una vez adquirido todo este conocimiento teórico, aún no soy en modo alguno competente en el arte de la medicina. Sólo llegaré a dominarlo después de mucha práctica, hasta que eventualmente los resultados de mi conocimiento teórico y los de mi práctica se fundan en uno, mi intuición, que es la conciencia del dominio de cualquier arte”.
A mi parecer, cualquier arte se da gracias al amor. Como si eso fuera la base.
Además de lo anterior, el autor desarrolla en este libro una idea de que el amor es una actitud y lo comenta bellamente al decirnos que es “una orientación de carácter que determina el tipo de relación de una persona con el mundo como totalidad, no como un “objeto” amoroso”.
Desarrolla por otra parte, ideas sobre la separatividad o estado de separación, que el ser humano siente y que yo llamaría falta de sentido; el enamoramiento; la igualdad, con sus falsos manejos; sobre lo que significa el dar; entre otras, de una manera clara, sencilla y llena de razón que es inevitable acentuar levemente con la cabeza y reconocer que algo nos mueve internamente.
Evidencia claramente que el amor requiere de ciertos elementos básicos: cuidado, responsabilidad, respeto y conocimiento. De ellos, el de responsabilidad, es un término que ha sido alterado como un deber impuesto por el exterior; y el autor nos dice que la responsabilidad es un acto voluntario, que constituye nuestra respuesta a las necesidades, expresadas o no, de otro ser humano. Ser “responsable” significa estar listo y dispuesto a “responder”.
Erich Fromm distingue distintos tipos de amor que expone: Amor Fraternal, Amor Materno, Amor Erótico, Amor así mismo y Amor a Dios.
Independientemente de nuestras apreciaciones es muy importante ver la postura del autor y reconocer los motivos por los que se separa y sus argumentos al respecto. Que son muy interesantes.
El autor hace una breve reflexión de cómo hemos preocupado por tener y no por ser y sus consecuencias en nuestro mundo, de cómo hemos empañado la idea del amor y no amamos.
Nos explica, además, que con disciplina, concentración, paciencia y preocupación, la práctica del amor puede llevarse a cabo.
En fin, el texto nos lleva a reflexionar sobre el fenómeno del amor, nos da argumentos y razones que permiten reconocer en nosotros, todo ese potencial dormido y desfigurado que existe e nosotros.
Fuente: Alejandro Tapia