El control de la diabetes no depende solamente de medicamentos e insulina, tampoco basta con un plan de alimentación saludable y con dejar el sedentarismo.
Para estar en control, también es necesario cambiar la forma de pensar, mejorar el estado emocional y aprender sobre autocuidado. Para tener éxito se requiere un cambio permanente en el estilo de vida del paciente y formar alianzas con el médico.
La mayoría de las personas ignora las causas que generan la diabetes y los mitos pueden interferir en su control. Es clave que las personas sepan que la diabetes tiene una base genética importante, pero se detona por un estilo de vida no saludable y exceso de peso.
1. La Meta
Conoce los indicadores que debes cumplir para controlar la diabetes.
• Glucosa en ayuno o antes de las comidas: menor a 130 mg/dL
• Glucosa dos horas después de los alimentos: menor a 180 mg/dL
• Triglicéridos: menor a 150 mg/dL
• Colesterol LDL (colesterol malo): menor a 100 mg/dL
• Presión arterial: menor a 130/80 mmHg y nunca mayor a 140/90 mmHg
• Revisión de riñones y ojos: Una vez al año
• Revisión de pies: A diario después del baño y pedirle al médico que lo haga en cada consulta.
2. Cuida tu visión
Cuando no hay un adecuado control de la glucosa en la sangre, los vasos sanguíneos de la retina se van dañando y, de no intervenir, el paciente puede perder completamente la visión, advierte Hernández.
3. No olvides los pies
La diabetes puede provocar pérdida de la sensibilidad en los pies, mala circulación de la sangre y deterioro del sistema inmunológico, por lo que una pequeña herida se puede infectar gravemente hasta provocar necrosis si no se actúa de manera oportuna. Y acude con tu médico si:
• Cambios en la coloración o temperatura.
• Ampollas, callos o úlceras.
• Descamación, grietas, dolor.
• Humedad entre los dedos u hongos en las uñas.
4. Boca sana
Cuando se vive con diabetes el cuidado dental se vuelve imprescindible porque el descontrol de la glucosa aumenta el riesgo de tener infecciones bucales y, a su vez, las infecciones descontrolan la glucosa.
5. Cambia tu menú
Vivir con diabetes no significa permanecer a dieta, asegura el endocrinólogo, se trata de aprender a comer de forma saludable, como deberían hacer todas las personas para prevenir enfermedades crónicas. Procura eliminar de tu dieta:
• Alimentos con alto contenido de azúcar: galletas dulces, pastel, miel, fruta en almíbar, atoles, tamales, bebidas dulces y pan dulce.
• Bebidas alcohólicas.
• Comida rápida: hamburguesas, pizzas, hot dogs, papas fritas, nuggets.
• Platillos fritos, empanizados o capeados.
• Vísceras: tripas, riñón, hígado, sesos…
• Embutidos: salami, tocino, paté, salchichas de cerdo.
• Grasas: chicharrón, mantequilla, queso crema, manteca.
6. Ponte en movimiento
El ejercicio es igual de importante que el plan de alimentación, destaca Hernández, pero eso no quiere decir que las personas con diabetes tengan que entrenar como si se estuvieran preparando para correr un maratón.
• Haz ejercicio mientras ves televisión.
• Realiza 2 o 3 bloques de ejercicio de 15 minutos continuos al día.
• Si tienes una bicicleta fija o una caminadora, ¡aprovéchalas!
• Sal a caminar, pasea a tu mascota.
• Sube y baja escaleras de manera continua.
• Haz actividad física con un amigo o familiar.
• Elige el horario en el que te sientas con más energía.
• Evita ejercitarte si tu glucosa se encuentra debajo de 80 mg/dL o arriba de 250 mg/dL.
7. No te deprimas
Recibir el diagnóstico de diabetes y enfrentarse a un estilo de vida distinto al que se ha llevado durante toda la vida son cuestiones que pueden provocar miedo, enojo, angustia o tristeza.
Además, el diagnóstico implica un duelo como el de cualquier pérdida, por eso se podría requerir la guía de un psicólogo que ayude al paciente adaptarse a su nueva vida.
Fuente: Sergio Hernández