Las huellas del tabaco y de la luz ultravioleta, en forma de miles de mutaciones, se han encontrado claramente en los primeros genomas completos del cáncer de pulmón y del cáncer de piel, respectivamente, que se acaban de presentar. El número de mutaciones encontradas en el cáncer de pulmón indica que el fumador adquiere una cada 15 cigarrillos fumados, aproximadamente.
Todos los cánceres están causados por mutaciones en el ADN de las células que se vuelven cancerosas, que se van adquiriendo a lo largo de la vida. Los estudios, que publica la revista Nature, revelan por primera vez prácticamente todas las mutaciones correspondientes a cada uno de los dos cánceres estudiados, así como los esfuerzos del organismo para repararlas y evitar la progresión hacia el cáncer sintomático.
En el genoma del cáncer de pulmón estudiado, correspondiente a una célula de la metástasis en la médula ósea de un varón de 55 años, se han hallado más de 22 mil mutaciones, mientras que en el del melanoma maligno, procedente de un varón de 43 años, el número de mutaciones es de más de 33 mil.
“Éstos son los dos cánceres más importantes en el mundo desarrollado cuya causa principal conocemos”, explica Mike Stratton, del Proyecto Genoma del Cáncer del Instituto Sanger de Wellcome Trust, institución que ha dirigido ambos estudios.
“Para el cáncer de pulmón es el humo del cigarrillo, y para el melanoma maligno es la exposición a la luz del Sol“. La acumulación de mutaciones no da lugar automáticamente a un cáncer, y todavía falta saber cuáles son las decisivas.
Fuente: Ruiz de Elvira