Cada vez que eliges lo que vas a comer, tomas decisiones de vida o muerte. Suena fuerte, ¿no? Sin embargo, lo afirman los especialistas en nutrición.
La buena noticia es que hoy tenemos la oportunidad, a diferencia de otros tiempos, de escoger los alimentos que harán que nuestra vida sea más larga, más sana y con mejor calidad, cosa que antes ignorábamos. Lo malo es que ya es difícil disfrutar unos tacos de chicharrón prensado, sin sentir culpa.
La realidad es que, sin importar si tienes 22 o 65 años, en tu siguiente comida decidirás cómo pasarás el resto de tus días.
Tenemos dos caminos: uno nos puede llevar al placer inmediato… y a visitar todas las farmacias, clínicas y hospitales en el futuro. El otro, a las altas probabilidades de correr una maratón en la categoría seniors, sentirnos llenos de energía, jugar luchas con los nietos en el jardín y, al mismo tiempo, tener una memoria privilegiada. La opción está en nuestro plato.
Los siguientes alimentos fueron seleccionados por el doctor Steven G. Prats, del Scripps Memorial Hospital en La Jolla, California, después de haber investigado su alto contenido nutricional y la aportación que hacen a la salud, y está publicado en su libro Super Foods, un bestseller del New York Times.
Los 14 superalimentos
1. Frijoles. Trata de comer por lo menos media taza a la semana. Incluye de todo tipo (pinto, bayo), así como lentejas, garbanzos y habas. Son buenos para el corazón, para equilibrar los niveles de azúcar en la sangre, te dan energía y previenen el cáncer, entre otras bondades. Contienen fitonutrientes, vitaminas, minerales, mucha fibra y son una de las fuentes de proteína más económica y saludable que hay.
2. Moras. Trata de comer de una a dos tazas diarias. Todas las moras, fresas y las uvas moradas. Pequeñas en tamaño, combinan más antioxidantes para combatir enfermedades que cualquier otra fruta o vegetal. Se las ha llamado “moras de la juventud” o “moras de la memoria”, y se lo merecen. Entre más oscuras sean, mejor.
3. Brócoli. Trata de comer de media a una taza al día. Incluye crucíferas, col, colecitas de Bruselas y coliflor. La Universidad John Hopkins anunció que un ingrediente que se encuentra en el brócoli no sólo previno el desarrollo de tumores en un 60 por ciento del grupo de estudio, sino que redujo el tamaño del tumor desarrollado en un 75 por ciento. El brócoli eleva el sistema inmunológico, baja la incidencia de cataratas, protege al corazón, a los huesos y previene defectos en el nacimiento.
4. Avena. Trata de comer de cinco a siete raciones al día. Incluye granos enteros, germen de trigo, arroz integral, trigo, amaranto, centeno, cuscús y linaza. La avena contiene un tipo de fibra que funciona como bala mágica contra el colesterol. Previene el cáncer de colon, protege contra los radicales libres e inhibe la formación de ciertos tipos de cáncer. Es baja en calorías, alta en fibra y proteínas.
5. Naranjas. Trata de comer una al día. Incluye limones, toronjas, mandarinas y limas. Es mejor comerla en gajos que en jugo. Los descubrimientos sobre el poder que tiene la naranja sobre la salud, prevenir el cáncer, los infartos, la diabetes y otras tantos padecimientos, son increíbles. Tiene efectos antiinflamatorios, antivirales y antialergénicos; además, fortalece los vasos capilares,entre muchas cosas más.
6. Salmón. De preferencia, salvaje. Trata de comerlo dos o tres veces a la semana.
Incluye también atún en lata, sardinas, trucha, lubina, ostiones y almejas. Por su alto contenido de omega 3, ácidos grasos, ayuda a aumentar el colesterol bueno, reduce la presión sanguínea y estabiliza el ritmo cardiaco, entre otras muchas cosas.
7. Calabaza amarilla. Sí, la de Halloween. Trata de comerla cotidianamente. En el mismo grupo están las zanahorias, pimientos amarillos y camote. Esta calabaza es de los alimentos más nutritivos conocidos por el hombre. La combinación de carotenoides que posee es uno de los mejores antioxidantes y disminuyen el riesgo de varios tipos de cáncer.
8. Soya. Trata de consumir, al menos, 15 gramos al día. Incluye todas sus formas, como leche, tofu, germen, edamames, miso y nueces (no en salsa). Los isoflavonoides actúan como antioxidantes y como estrógenos, entre otros beneficios.
9. Espinacas. Trata de comer una taza, si son hervidas, o dos crudas diariamente. Popeye las recomendaba sólo por el hierro, sin embargo, hoy sabemos que es la sinergia de sus amplias propiedades y fitonutrientes que hacen de las hojas verdes unas superestrellas. Mencionar los beneficios acapararía todo este espacio.
10. Té. Trata de tomar una o más tazas a diario. Incluye té blanco, verde, rojo, oolong y negro, que pertenecen a la misma planta, pero varía en el proceso y fermentación de las hojas (no incluye infusiones herbales). Una taza de té negro contiene más de 4,000 componentes químicos, entre ellos, cerca de 268 ml. de flavonoides maravillosos para la salud, entre otros beneficios.
11. Jitomates. Trata de comerlos crudos, cocidos, deshidratados, en jugos o salsas, muchas veces a la semana. Contienen el poder rojo del licopeno, que ha demostrado tener una gran cantidad de propiedades biológicas únicas que no sólo ayudan a mitigar el cáncer, sino que es una parte importante de la red de antioxidantes para la piel. Es como un bloqueador solar interno. Ayuda contra la degeneración macular.
12. Pavo. Lo mejor es pechuga sin grasa. Ingiere tres o cuatro raciones a la semana. Es muy bueno para el corazón, para fortalecer el sistema inmunológico, es una buena fuente de selenio, crucial para un sinnúmero de funciones básicas del organismo, entre otras tantas propiedades.
13. Nueces. Trata de comer una onza cinco veces a la semana. Incluye almendras, pistaches, cacahuates, semillas de ajonjolí, calabaza, avellanas y nuez de la India. El comer estas delicias con moderación, reduce entre un 15 y un 55 por ciento el riesgo de tener un infarto, según el Dr. Steven G. Prats, autor del libro Super Foods. Disminuyen también los niveles de colesterol, el riesgo de diabetes, cáncer, enfermedades coronarias y otros padecimientos.
14. Yogurt. Trata de consumir dos tazas diariamente. Tiene múltiples beneficios, que estimulan el sistema inmunológico dentro y fuera del tracto gastrointestinal. Se ha comprobado que si comes el yogurt natural hecho de bacilos, se reducen las bacterias nocivas en las vías respiratorias y urinarias.
Recordemos que sentirnos sanos y con energía, es algo que sólo valoramos cuando no lo tenemos. La opción está en tu plato….
Fuente: Gaby Vargas