La vida de las personas con diabetes mellitus podría simplificarse drásticamente con la ayuda de un nuevo dispositivo que controla el nivel de azúcar en la sangre de forma constante y permite a pacientes inyectarse insulina en el momento si lo necesitan, informaron expertos.
El dispositivo de Medtronic Inc. combina una bomba de insulina y un sistema continuo de vigilancia sanguínea. El aparato activa una alarma si el nivel de azúcar no está en los niveles correctos.
Los pacientes están pidiendo a gritos probar y utilizar el dispositivo, dijeron investigadores de la empresa durante una convención de la Asociación Estadounidense de Diabetes en Washington D.C. El uso del dispositivo, llamado Minimed Paradigm Real Time Insulin Pump and Continuous Glucose Monitoring System, ha sido aprobado para diabéticos insulino-dependientes mayores de 18 años. Las personas con diabetes mellitus tipo 1, también conocida como diabetes juvenil, son insulino-dependientes, como también lo son aquellos con diabetes tipo 2.
“Es un avance bastante excitante“, dijo John Buse, vicepresidente de la Asociación Estadounidense de Diabetes. “No estoy seguro que sea la mejor bomba de la historia ni el mejor dispositivo de vigilancia de todos los tiempos. No es un páncreas artificial (…) pero se acerca bastante”, agregó Buse en una entrevista.
Linda Frederickson, una enfermera y educadora en temas de diabetes que probó el dispositivo para Medtronic, dijo haberse sorprendido sobre cuánta información le dio el dispositivo. “Escribo libros y antes escribía libros sobre alimentos y carbohidratos y creo que soy medianamente inteligente (…) Pero aprendí más sobre los alimentos al utilizar el sensor. Uno puede saber qué efectos tendrá tu comida preferida y cuándo los tendrá”, dijo en una charla para inversionistas y analistas.
El doctor Bruce Buckingham, un pediatra y endocrinólogo de la Universidad de Standford que prueba éste y otros monitores, dijo que los padres de niños con diabetes tipo 1 estaban asombrados de ver los efectos del monitor en sus hijos.
“Realmente han cambiado sus hábitos y cómo comen y manejan su insulina“, dijo Buckingham durante la reunión.
El estudio de Buckingham demostró que, como promedio, los niños en su estudio mostraban un descenso de un 20% en A1c, una medida de azúcar. A1c mide el nivel promedio en los últimos tres meses de la glucosa en la sangre de los pacientes.
“Es muy sencillo reunir información para este estudio. Los pacientes están deseosos por participar“, dijo Buckingham. “Si uno tiene niños con diabetes, el 75% de los ataques ocurren de noche, así que hay un monitoreo que los alerta cuando los niveles están bajos. Cerca de 21 millones de estadounidenses padecen de diabetes mellitus y de ellos tres millones sufren de diabetes tipo 1.
Los pacientes por lo general deben pincharse los dedos con agujas continuamente durante el día, medirse los niveles de azúcar en la sangre, y luego inyectarse insulina o comer algo para ajustar su nivel de azúcar. Los controles requieren atención constante y disciplina; y los pacientes no sufren síntomas inmediatos si no logran controlar el azúcar en su sangre, pero pueden llegar a perder miembros del cuerpo y sufrir por un mal funcionamiento de los riñones, e incluso morir.
Las bombas de insulina permiten a los pacientes tomar insulina de día y noche tanto de forma preprogramada como según sus necesidades. Los sensores continuos de glucosa hacen lecturas de los niveles de azúcar en la sangre minuto a minuto, utilizando un pequeño sensor colocado bajo la piel que transmite información a un dispositivo manual.
Frederickson, una diabética tipo 1 hace muchos años que dice ya tener buen control de sus niveles sanguíneos de azúcar, aseguró que el dispositivo mejoró más aún sus niveles. “Estoy simplemente feliz con el dispositivo”, dijo la enfermera. “Mi A1c ha mejorado. Mi control de glucosa ya era bastante bueno, pero había bajado medio punto”, agregó la mujer.
La empresa está buscando autorización de la Administración de Fármacos y Alimentos estadounidense (FDA) para utilizar el dispositivo en niños, pero los doctores pueden recetar cualquier aparato o medicamento autorizado si lo creen adecuado.
Fuente: Reuters