A partir de los 35 años se comienza a perder masa muscular y densidad ósea como un proceso degenerativo normal del cuerpo, sin embargo, el ejercicio con pesas ayuda a recuperar la fuerza y a prevenir osteoporosis o disminuir el riesgo de padecerla.
Beatriz Machaco Luna, gerente de gimnasio, explica que el único ejercicio que aumenta la densidad ósea son las pesas.
“Puedes correr, puedes nadar, puedes hacer otro tipo de ejercicios que te van a mantener muy bien en cuestión de condición física, pero las pesas lo que hacen es que aumentan tu masa muscular y el hecho de aumentar tu masa muscular protege todas las articulaciones y toda la irrigación sanguínea que tenemos en los músculos y además fortalece los huesos”, señala.
Marisol Valdés Escárcega, médico geriatra, recomienda el ejercicio con pesas para los pacientes con osteoporosis como parte de la receta.
“Es muy recomendable que hagan ejercicio con pesas, de hecho en muchos casos es una de las partes fundamentales del tratamiento, porque al hacer el ejercicio con pesas mejora el rendimiento del músculo y la producción de hueso”, señala.
Antes se creía que hacer ejercicio con pesas o con resistencia podía incrementar el riesgo de fracturas, refiere la especialista, sin embargo eso es sólo un mito.
“El ejercicio con pesas facilita la oxigenación del músculo y mejora también el remoldeamiento óseo. Hay varias sustancias involucradas en la producción de hueso, tanto a nivel molecular como a nivel celular, y por eso es muy importante el ejercicio, porque está comprobado que mejora la producción de estas sustancias”, detalla.
Sin embargo, aclara que una vez que se establece el diagnóstico de osteoporosis el ejercicio con pesas no sustituye el tratamiento farmacológico para la formación de hueso.
Además, el trabajo de pesas ayuda a que las zonas musculares adquieran mayor fuerza y compensen el trabajo de la estructura ósea.
“El adulto mayor, sin importar su edad, tiene los mismos beneficios que un adulto de 40 o 50 años si hace pesas, en cuanto al progreso muscular; lo que quiero decir con esto es que el tejido muscular, aunque tenga 90 años, es como un tejido muscular de 50, si se le trabaja adecuadamente hay una repercusión y un incremento de la fuerza y del propio tejido”, asegura.
“Les facilita el sentarse y pararse de la cama, el incorporar su tronco, soportarse en unas muletas, en un bastón, en una andadera; el que su cuerpo pueda ser soportado para caminar, poder tomar un portafolio, una maleta, poder subir a un camión, poder cargar una bolsa de supermercado, en la vida diaria todo el tiempo necesitan fuerza”, señala.
Fuente: Beatriz Machaco Luna y Marisol Valdés Escárcega.
