Si es padre, madre, hermano, tía, maestro o médico de un adolescente, es muy probable que algún día le haya escuchado decir “Fue un ‘free'”, “Ya me lo ligué” o ‘Se quedó en ‘casual sex'”, pero ¿sabe exactamente a qué se refieren estas expresiones? Cada una de las frases tiene que ver con el cómo ejercen su sexualidad los adolescentes mexicanos: lejos de prejuicios y con más libertad, dando rienda suelta a las sensaciones, siempre tratando de vivir el momento, considera José Ángel Aguilar, especialista en adolescentes.
“Quieren vivir el ahora ante el permanente caos que perciben a su alrededor, y eso determina cómo se relacionan sexualmente“, agrega el coordinador general de la Red Democracia y Sexualidad (DEMYSEX). Por eso es imprescindible hablarles de métodos anticonceptivos.
Proveer información
Alejandro Morales, ginecoobstetra, coincide en que se debe romper la barrera y dar información. “Si queremos un mejor futuro para ellos, tenemos la obligación de dárselas.
“Existen niñas de 11 o 12 años que se están embarazando. Muchos de estos embarazos terminan en aborto, que no siempre se hacen en las mejores condiciones y causan muertes maternas”, afirma el especialista en salud reproductiva.
La gama de anticonceptivos es basta. La clave es informarse y acudir con un médico familiar o ginecólogo para evaluar cuál es la mejor opción para el adolescente, incluso aunque no tenga vida sexual activa.
“¿De qué nos sirve tener tal variedad, si no les decimos que existen? Hay que ponérselos en la mesa, y esto no significa que los estemos invitando a tener relaciones sexuales”, agrega Morales del Olmo.
“Los padres y madres se preocupan, pero no se ocupan. Vemos que huyen al tema de educación sexual, cuando finalmente niños y jóvenes nos podrían dar una clase, pero a veces con muy inadecuada información”, indica Aguilar.
En la página unapormes.com.mx, creada por Bayer, los jóvenes pueden aclarar con expertos sus dudas sobre anticonceptivos.
Fuente: Alejandro Morales
