El cáncer de ovario, el tercero más común en las mujeres después del de mama y cervicouterino, frecuentemente se confunde con colitis.
Si los síntomas de la colitis, como inflamación y dolor abdominal, se presentan al menos 12 veces en un mes, independientemente del tiempo que duren en el día o si se quitaron con medicina, y si las molestias se repiten, es un signo de alarma, señalan oncólogos.
La mujer siente incomodidad en el abdomen, lo siente distendido, hay dolor abdominal difuso de baja intensidad pero constante, pueden aumentar las flatulencias y puede haber estreñimiento alternado con diarrea.
La razón de estos síntomas es que el ovario está ubicado junto al rectosigmoide (parte final del colon), de modo que cuando hay tumoración en el ovario, por pequeña que sea, ésta presiona el intestino y provoca las molestias que suelen atribuirse a la colitis.
La mujer, especialmente si se encuentra en la menopausia, debe hacerse un ultrasonido transvaginal para descartar que sea un tumor.
Al igual que la mastografía, al llegar a los 40 años, todas las mujeres deben realizarse un ultrasonido transvaginal para descartar signos de cáncer de ovario y repetirlo cada año.
Si alguna mujer de su familia ha padecido cáncer de mama o de ovario, el ultrasonido transvaginal debe hacerse desde los 30 años y repetirse cada 6 meses.
La importancia de realizar los estudios con esta periodicidad es que el cáncer de ovario es muy agresivo y, de hecho, causa más muertes que los tumores del cuello del útero o de la mama porque se detecta en etapas más avanzadas.
Un agravante es que el cáncer de ovario epitelial, que es el más común, no está confinado a este órgano, sino que se disemina rápidamente en la cavidad abdominal.
Fuente: Dolores Gallardo.