Desde el inicio de la pandemia de Covid-19 se observó que la población de la tercera edad es la más vulnerable.
Lo anterior ha hecho que el distanciamiento social sea una indicación primordial en esta población para evitar contagios y sus complicaciones.
El aislamiento incluye trabajo, familia y actividades sociales. Asimismo, evitar el contacto con menores de edad ya que pueden ser portadores asintomáticos.
El ejercicio en casa y una alimentación balanceada son recomendables para mantener un sistema inmune óptimo.
Realizar actividades agradables como lectura, juegos de mesa, escuchar música. No fumar ni consumir alimentos procesados y de alto contenido calórico.
Al permanecer en casa procurar iluminación con luz y ventilación natural. Mantener limpia la casa, conservar limpias las superficies de mesas, escritorios, entre otros.
Procurar lavado de mano frecuente con agua y jabón, por lo menos durante veinte segundos o bien usar alcohol gel al 70%.
No recibir visitas.
Al toser o estornudar, taparse con un pañuelo y desecharlo o bien usar el ángulo interno del codo.
Si se padece hipertensión arterial, diabetes mellitus, dislipidemias, entre otras., continuar con el tratamiento farmacológico, de acuerdo a las indicaciones médicas.
Mantener monitoreo de sus niveles de presión arterial y glucosa, si lo requieren.
No suspender ningún tratamiento farmacológico sin la autorización o evaluación previa de su médico.
Si aparecieran síntomas de coronavirus como fiebre, dolor de garganta, dolor muscular, tos seca, disminución o pérdida del olfato o del gusto, puede permanecer en casa, en reposo y cuidando su estado de hidratación. Puede llamar a su médico y hacerle saber sus síntomas.
Si apareciera dificultad para respirar, sobre todo si es progresiva, es una indicación para buscar ser evaluado en un hospital.
Evitar automedicarse en todo momento.
Fuente: Pedro Gutiérrez