En Israel, para combatir la obesidad en los niños y adolescentes se ha prohibido la venta en las escuelas de bebidas gaseosas, como la Coca Cola, que deberán ser sustituidas por agua, zumos de fruta, té y chocolate.
El diario Yediot Aharonot informa que la nueva disposición entrará en vigor cuando comience el nuevo año escolar tras las vacaciones de verano. Además, a partir de noviembre también tendrán que cambiar los alimentos que ofrecen los puestos y quioscos que operan dentro de las escuelas.
El ministerio también ha instruido a los propietarios de esos locales sobre los alimentos que podrán vender dentro de los establecimientos y de los cuales tendrán que desaparecer las patatas fritas y las salchichas entre otros alimentos grasos.
Asimismo, el ministerio asesorará a los padres para cambiar las dietas habituales de sus hijos por un “menú sano”, que para el desayuno debe incluir chocolate o té con leche, una rodaja de pan untada con mantequilla, y un potaje de sémola con leche y semillas o granos. Según un informe del Ministerio israelí de Educación, el 18% de los menores de edad sufre de obesidad o de sobrepeso.
Para las diez de la mañana, la hora del recreo escolar, Educación recomienda un bocadillo (sándwich) de atún o verduras y una fruta; y para el almuerzo se deberá proporcionar una milanesa (filete empanado) o fiambre, pan y verduras frescas enteras.
Fuente: EFE