Declararle la guerra a la calvicie no implica someterse a tratamientos dolorosos con nulos resultados. En la actualidad, existen dos métodos indoloros que por su seguridad y efectividad han sido aprobados por la FDA, o Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos.
Uno es una píldora (finasteride) y el otro es un spray (minoxidil), así que, según el paciente, puede ser ingerido o untado, dice el tricólogo Javier Ruiz, miembro de la Fundación Mexicana para la Dermatología.
Ruiz asegura que casi siete de cada diez hombres tienen una variante de alopecia androgenética, de la que existen siete tipos, que van desde las famosas “entradas” hasta la caída del cabello.
La alopecia androgenética masculina provoca el adelgazamiento del pelo, y se debe a que los cabellos de la parte superior de la cabeza heredan receptores sensibles a andrógenos (hormonas masculinas) que provocan la destrucción de las mismas.
El cabello es un órgano que no se reproduce. Una vez que el folículo se muere ya no es capaz de regenerarse. En la actualidad no existe ningún producto que lo regenere.
Así que estos tratamientos están indicados para quienes no han perdido el cabello por completo, sino que está en proceso de destrucción, pues pueden detener y revertir el daño.
Es ideal que las personas que genéticamente tienen cierta predisposición a la calvicie acudan lo antes posible con el dermatólogo para que les prescriban un tratamiento.
Cualquier persona que sufra adelgazamiento o pérdida del cabello debe acudir con el especialista para un diagnóstico adecuado.
En ocasiones, las causas son simples y tienen remedio fácil; puede deberse a exceso de grasa, bacterias, hongos o enfermedades físicas o mentales, señala Ruiz.
Con el finasteride, que se ingiere en dosis de un miligramo diario, los pacientes pueden revertir el proceso de adelgazamiento del cabello.
Este medicamento inhibe la enzima 5-alfa-reductasa, que origina la producción de hidrotestosterona, hormona masculina que destruye el cabello, explica Ruiz.
El minoxidil, que se unta en la cabeza, es una molécula que actúa a nivel de los vasos sanguíneos.
“Cuando el folículo piloso va destruyéndose, se cierran los capilares que nutren el cabello, esta molécula, al ir regenerando los vasos sanguíneos, produce la regeneración”, precisa el especialista.
Estos tratamientos no compiten dentro de las fases moleculares en las que actúan, así que el paciente puede usar ambos.
Fuente: Médica Sur
hola mi nombre es jorge me parece muy interesante este metodo pero yo no se si funcione conmigo tal vez me puedan ayudar no me crece pelo desde que era niño mis hermanos tampoco tienen pelo y no sabes que hacer entonces alguien podria ayudarme y somo de bajos recursos economicos
Vaya Jorge, suena como algo genético, algo que la ciencia no ha sido capaz de superar todavía.