Un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile concluyó que los adolescentes que fuman con autorización de sus padres están cinco veces más expuestos a ser consumidores de por vida, en relación a los jóvenes que consumen cigarrillos a escondidas.
La investigación, que publica el diario El Mercurio de Santiago, agrega que las personas que inician el consumo de tabaco con el permiso paterno tienen 20 veces más riesgo de llegar a fumar más de una cajetilla diaria.
Se concluyó, además, que quienes comenzaron a fumar antes de los 15 años tienen el doble de riesgo de desarrollar un tabaquismo crónico.
La doctora Verónica Iglesias, quien encabezó el estudio, aseguró al rotativo que esta es la primera vez que se comprueba la influencia del papel de los padres en el tabaquismo. Indicó que debido a la evidencia, la idea “es potenciar que se evite el dar permiso a los niñosâ€. “Aún en aquellas casas en que los padres son fumadores, hay que evitar el consumo (en los hijos), porque comprobamos que una vez que se inician es mucho más difícil dejarlo. De las personas encuestadas, el 72% fumaba actualmenteâ€, afirmó.
A nivel mundial, se estima que el 50% de las personas que comienzan a fumar en la adolescencia, y continúan haciéndolo durante la edad adulta, morirán por causas derivadas del tabaquismo. Pese a ello, uno de cada cinco adolescentes entre 15 y 16 años tiene permiso de sus padres para fumar.
El estudio se hizo entre julio y agosto de este año y se basó en encuestas a 400 adultos de ambos sexos, entre 30 y 60 años, que comenzaron a fumar antes de los 18 años.
Fuente: DPA
