Muchos no entienden el por qué del feminismo, lo critican interpretándolo como un grito histérico y sin sentido de la mujer.
Ahora, resumimos el discurso que describe a la mujer a través de los siglos, palabras cargadas de sentimientos y emociones, ideas que describen su desconocimiento e incomprensión dibujando trazo a trazo el movimiento feminista.
– Femineidad: Actitud pasiva, obediencia, suavidad, cobardía, ignorancia, cariñosidad, falta de capacidad, falta de memoria.
Diccionario enciclopédico de la Psique.
– Puesto que la mujer condujo al hombre al pecado, es justo que reciba al hombre como la esclava al soberano.
San Ambrosio.
– La mujer que se niega al deber conyugal debe ser arrojada al río.
Proverbio sumerio.
– Durante su infancia, una mujer debe depender de su padre; durante su juventud, depende de su marido; si ha muerto su marido, de sus hijos; si no tiene hijos, de los próximos parientes de su marido y, en su defecto, de los de su padre; si no tiene parientes paternos, del soberano; una mujer no debe nunca gobernarse a su antojo.
Ley de Manu de la India.
– Aunque sea censurable la conducta de su marido, aunque se dé a otros amores y esté desprovisto de buenas cualidades debe la mujer virtuosa reverenciarlo constantemente como a un Dios.
Ley de Manu de la India.
– De los cinco a los 20 años, estimarás un mozo en 20 siclos, y una moza, en 10 (Siclo: moneda bíblica).
Levítico de la Biblia.
– No debe depositarse ninguna confianza en las mujeres.
Homero.
– Cada tanto dar una paliza a la mujer es algo saludable. Si tú no sabes por qué, ella sí lo sabe.
Proverbio árabe.
– La mujer es mala. Cada vez que se le presente la ocasión, toda mujer pecará.
Buda.
– La mujer da al marido dos días de felicidad: el de la boda y el de su entierro.
Hiponacte, poeta griego.
– El marido tiene derecho a matar a su mujer. Cuando una mujer se queda viuda debe cometer suicidio como prueba de castidad.
Confucio.
– Odio a la mujer docta. Ojalá no entre en mi casa mujer que sepa, más de lo que una mujer debe saber.
Eurípides.
– No hay en el mundo nada peor que una mujer, excepto otra mujer.
Eurípides.
– La mujer es por naturaleza inferior al hombre; debe, pues, obedecer… El esclavo no tiene voluntad; el niño la tiene, pero incompleta; la mujer la tiene, pero impotente.
Aristóteles.
– La mujer, cuando piensa sola, piensa mal.
Publio Siro.
– Déis a los varones el doble de lo que deis a las hembras.
El Corán.
– Si se anuncia a alguno de ellos el nacimiento de una hija, su rostro se nubla y se pone como sofocado por el dolor.
El Corán.
– La vida de una mujer vale la mitad que la de un hombre en el caso de que ella sea asesinada y sus parientes reclamen indemnización.
Yaroslao el Sabio.
– Mentir, llorar, coser, son los dones de Dios a la mujer.
Proverbio latino.
– La mujer es el hombre imperfecto.
Averoes, filósofo.
– El sexo femenino es la confusión del hombre, bestia insaciable, ansiedad continua, guerra incesante, ruina diaria, recinto de tempestad y obstáculo a la devoción.
Vincent De Beauvais.
– Derecho de pernada: Derecho que permite a los señores feudales pasar con la esposa de un siervo la primera noche después de la boda.
– …Está bien que el hombre pegue a su mujer, sin matarla y sin herirla cuando desobedece al marido.
Derecho Consuetudinario, Valle del Beauvaisis.
– Permite golpear hasta hacerla sanfrar, siempre que la intención sea buena, es decir para coregirla.
Derecho Consuetudinario, Valle del Beauvaisis.
– La esposa ha de obedecer a su marido y obrar de modo que le complazca, porque su placer va antes que el vuestro. No debe ser arrogante, ni replicarle no contradecirle, sobre todo en público, pues Dios ha ordenado que las mujeres estén sometidas a los maridos.
La Ménagier. Tratado de moral y manual de conducta.
– La mujer es más débil de mente y de cuerpo, y por naturaleza más impresionable. Las mujeres son también más propensas a desviarse de la verdadera religión, tienen memoria débil y es vicio inherente a ellas el de no ser disciplinadas, sino al contrario, seguir sus propios impulsos perdiendo todo sentido del deber.
J. Sprenger.
– No hay manto sin saya que peor siente a la mujer o a la doncella que el querer ser sabia.
Martín Lutero.
– Las mujeres casadas, los niños, idiotas y lunáticos, no pueden legar sus propiedades.
Estatuto de Enrique VIII.
– En Inglaterra se adopta la jaula para aptos como castigo para las esposas descontentas o malignas. En el Continente, la jaula se reemplaza por un canasto y se sumerge en la laguna más cercana tantas veces como lo indique la condena.
Siglo XVII.
– Sólo una espada no se oxida jamás: la lengua de la mujer.
Refrán Armenio.
– Aunque el hombre y la mujer sean dos mitades, estas mitades no son ni pueden ser iguales. Hay una mitad principal y otra subalterna; la primera manda y la segunda obedece.
Moliere.
– Una mujer amablemente estúpida es una bendición del cielo.
Voltaire.
– La mujer depende de nuestros sentimientos, del precio que pongamos a su virtud, de la opinión que nos merezcan sus encantos y sus méritos.
J. J. Rousseau.
– La mujer es un vulgar animal del que el ho,bre se ha formado un ideal demasiado bello.
Flaubert.
– Rara vez se equivoca quien piensa de las mujeres lo peor que puede.
J. Home.
– La mujer que piensa da tanta repugnancia como el varón que piensa.
G. Lessing.
– Las mujeres no son otra cosa que máquinas de producir hijos.
Napoleón.
– La mujer puede, naturalmente recibir educación, pero sum mente no es adecuada a las ciencias más elevadas, a la filosofía y a algunas artes.
F. Hegel.
– …Una especie de término mediio entre el niño y el hombre, que es el verdadero ser humano.
A Schopenhahuer.
– En toda mujer de letras hay un hombre fracasado.
Ch. Baudelaire.
– No hay nada que se parezca tanto a un hombre tonto como una mujer sabia.
J. Benavente.
– La mujer es la píldora amarga que la naturaleza y el arte se han complacido en dorar, para que el hombre la trague más fácilmente.
Ramón y Cajal.
– La mujer parece resuelta a mantener la especie dentro de límites mediocres, a procurar que el hombre no llegue nunca a ser semidios.
Ortega y Gasset.
La trascendencia de estas frases es que fueron escritas por líderes de opinión: por religiosos, filósofos, escritores, gobernantes, sabios, premios Nobel y representan tan sólo una pequeñísima muestra de todo lo que se ha dicho sobre la mujer.
¿No les parece suficiente como para motivar un movimiento de revelación?
Fuente: Josefina Leroux