¿Realmente me sobran kilos?

Hay dos datos clave para saber si una personas está con sobrepeso y debe someterse a un régimen para adelgazar: el índice de masa corporal y el perímetro de su cintura. Por desconocerlos, a veces se sigue un régimen sin necesidad.

Una cinta métrica, un espejo y una balanza. Estas son las herramientas básicas, además del asesoramiento del médico, para saber si el peso corporal de una persona es excesivo y está poniendo en peligro su salud.

Presumiblemente las ventas de estos “productos para medir el cuerpo” se dispararán en los próximos años, porque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha adelantado que en 2015 habrá 2300 millones de personas con sobrepeso y otros 700 millones con obesidad en todo el mundo.

“Lograr el peso adecuado y mantenerlo requiere tiempo. Para ello es necesario estar motivado, contar con la ayuda del médico y no recurrir a dietas milagro que puedan poner en peligro nuestra salud”, según la endocrinóloga Susana Monereo, de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y de la SEEDO (Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad).

Para el doctor Daniel Gutiérrez, del Área de Metabolismo del laboratorio internacional Roche Farma, “la solución, según los expertos, es el llamado tratamiento integral, basado en una alimentación equilibrada, ejercicio físico y un fármaco en caso que sea necesario que nos ayude a perder peso, es decir, perder grasa”.

La medición del índice de masa corporal (IMC) y del perímetro de cintura, para conocer rápidamente su situación, y el médico para aconsejar sobre cómo reducir peso, son las claves para conseguir un peso adecuado según estos expertos, que analizan los dos parámetros básicos para identificar si una persona tiene exceso de peso.

El IMC es un parámetro que se utiliza desde hace años para evaluar la conveniencia del peso que tiene una persona en relación a su altura, y permite clasificar a los pacientes según su grado de sobrepeso u obesidad.

Es una medida sencilla, fácil de obtener y universalmente reconocida, que consiste en aplicar la siguiente fórmula: IMC = Peso (expresado en kilogramos) dividido por Altura ² (al cuadrado) y expresada en metros.

Según el Consenso SEEDO 2007, siempre que los valores del IMC superen el nivel de “25” se debe consultar al médico para saber qué pasos hay que seguir y cuáles son las medidas más recomendables para perder peso, las cuales siempre quedan circunscritas a un tratamiento integral, que incluye alimentación equilibrada, ejercicio físico y fármacos siempre que estén indicados.

El peso en el “sube y baja”

Pero ‘Estar a dieta’ “es una idea en vías de convertirse en obsesión tanto en mujeres como en hombres, aunque las primeras que se ven más afectadas. Las personas más proclives a tomar el camino de la dieta sin necesitarlo son quienes ya han bajado de peso con anterioridad, personas delgadas, personas jóvenes, deportistas o artistas”, según especialistas.

Se calcula que 5 de cada 10 mujeres reconocen que están a dieta aunque la media de su IMC es de 20,5, lo que indica que están dentro de parámetros de peso normales.

La mayoría de las personas que intentan bajar de peso sin supervisión médica sufren el llamado efecto “yo-yo”, también conocido como Weight Cycling, cuya traducción puede ser peso oscilante o cambiante, y que consiste en que peso perdido se recupera con creces después de concluir el régimen de aldelgaamiento.

Además, según los expertos “dado que el IMC puede conducir a confusión en determinados casos, existe también el perímetro de cintura, una medida que complementa la idea que el IMC nos puede dar”.

¿En qué casos el IMC puede ser equívoco? “Por ejemplo, una atleta con una masa muscular desarrollada para ser la mejor en su disciplina puede dar un IMC que indique obesidad” según Monereo y Gutiérrez.

Explican que “para medirse el perímetro de la cintura hay que tomar una cinta métrica, rodear la cintura con ella y leer la cinta en estado relajado y sin ropa, la cual pueda hacer que se sumen centímetros de más”.

En la mujer el perímetro de cintura se considera saludable si es inferior a 82 cm, y en el hombre si es menor de 95 cm. Si se superan estas cifras es necesario visitar al médico para bajar de peso y reducir la grasa abdominal, según el consenso 2007 de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad.

Fuente: EFE