La obesidad infantil podría estar relacionada con alteraciones neuronales según investigaciones realizadas en México.
El trastorno neurológico te lleva a la obesidad. Hay una modificación en los circuitos neuronales, lo que lleva a una mala regulación en el control del impulso y esto detona que el niño no pueda inhibir lo que está comiendo y se genera la obesidad.
Más allá de dieta y ejercicio sí requieren también un tratamiento farmacológico. Se explicó que con el tratamiento farmacológico se modularía el impulso.
Al mejorar el impulso en general lo que haría es que regularía esta incapacidad para dejar de comer.
Los investigadores realizaron resonancias magnéticas a 15 niños con obesidad de 7 a 15 años y a un número similar sin este padecimiento.
Los estudios mostraron que algunos de los circuitos neuronales de niños con obesidad estaban apagados y su velocidad para enviar información al cerebro estaba aumentada, lo que produce saturación; en comparación con quienes no tienen la enfermedad.
Los investigadores también estudiaron a 15 niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad, a 10 con problemas de aprendizaje y a 10 con talla baja; todos presentaban alteraciones neurológicas en comparación con quienes no tenían ningún padecimiento.
Se aseguró que, de hecho, los niños con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad tienen de cuatro a cinco veces más riesgo de padecer obesidad.
Para el experto es fundamental que ante la obesidad y los padecimientos antes mencionados, los niños acudan a una evaluación neurológica.
Ante este tipo de problemáticas los papás pueden pensar que existan situaciones en la familia que están disparando estas conductas, pero existe la posibilidad de que haya factores neurológicos que impidan que los niños regulen estas conductas.
Fuente: Federico Gómez, Eduardo Javier Barragán